En este artículo se va a tratar de explicar las fases de la reproduccion del caballo; Ciclo estral, gestación de la yegua y el parto, así como información sobre las condiciones y la alimentación que debe de tener un potro después de nacer.

Información sobre el ciclo estral yegua para la reproduccion del caballo

ciclo reproductivo
El ciclo reproductivo de las yeguas, como en la mayoría de las especies, está regulando por el fotoperiodo.
Los animales perciben los cambios en la duración diaria de la luz solar. La señal luminosa es transformada en señales endocrinas por medio de la glándula pineal, que interactúa con el hipotálamo, la hipófisis y las gónadas, para regular las etapas de la fisiología reproductiva.
La actividad ovárica aumenta conforme se incrementan las horas de luz a partir del solsticio de invierno el 23 de diciembre. Conforme aumentan las horas de luz se inicia la época ovulatoria. A partir del solsticio de verano el 23 de junio las horas de luz disminuyen y se inicia la etapa anovulatoria.
Durante la época ovulatoria las proteínas tienen una importancia vital, ya que son necesarias para facilitar la gestación del embrión y es importante que estén presentes en la alimentación de la yegua.
Los ciclos ováricos de las yeguas se repiten habitualmente cada 21 días. En el momento de la ovulación la yegua está receptiva para ser cubierta por el semental. En los últimos años, debido a la existencia de enfermedades que se contagian a través de la cubrición, cada vez se utiliza más la inseminación artificial. Estas enfermedades, como la Arteritis viral y Neumonía equina, son responsables de abortos a término de gestación. Una vez que una yegua o caballo reproductor se contagia, puede transmitir la enfermedad a otros ejemplares. El perjuicio de estas enfermedades, que apenas afectan al individuo portador, es muy grande. Incluso hay países a los que no se puede exportar caballos que sean portadores.
Instituciones públicas como Yeguada Militar o La Yeguada del Bocado han eliminado la monta natural para preservar a sus ejemplares y garantizar la sanidad del semen que distribuyen, y deben ser un ejemplo para el resto de los ganaderos.
Las yeguas salen de nuevo en celo a los pocos días de parir. Hay ganaderos que las cubren entre el día 9 o 11 después del parto, otros que esperan un mes o dos y de vez en cuando las dejan descansar un año.

Gestación yegua

Una vez que la yegua se ha preñado deben transcurrir unos 11 meses hasta el nacimiento del potro, aunque en algunos casos este periodo se alarga. Durante la gestación las yeguas tienen la capacidad de gestar mientras amamantan y es importantísimo que en esta etapa su alimentación contenga proteínas y calcio para abastecer a la producción de leche y a la formación del feto. A partir del séptimo mes de gestación, debido al volumen alcanzado por el feto, la yegua tiende a comer menos, aunque sus necesidades aumentan, por lo que a alimentación tiene que ser rica en contenidos. Normalmente, los potros se destetan entre el 4º y 6º mes de vida.
La yegua va dejando de producir leche gradualmente desde el pico de producción máxima, que es entre el 2º y 3º mes después del parto. A partir del 2º mes el potro comienza a mordisquear otros alimentos además de la leche y en el 4º está preparado para alimentarse sin lactancia.
En toda esta época es muy importante suministrar piensos adecuados para cada momento, individuo o edad. Piensos Valle, tanto en su gama premium como en su gama equino nutrición, tiene piensos adaptados para potros según la edad y para yeguas según el momento. En el catálogo de nuestra web está explicado.

Parto de una yegua

parto

Previamente al parto las ubres de yegua aumentan de tamaño, y en algunos casos producen leche desde dos semanas antes. Las yeguas en general están más relajadas y adormecidas durante la preñez, y especialmente cuando se acerca el momento del parto. Unas horas antes, la temperatura corporal baja un grado. La modificación del pH alcalino de la leche en esos días previos es un indicio de la proximidad del parto, ya que se acidifica ligeramente. Con unas tiras reactivas de pH podemos controlar esta variación y tener la certeza de la proximidad del parto.
Las yeguas en general paren fácilmente, en un lugar tranquilo y seguro para ellas. Un dato curioso es que ellas tienen la capacidad de retrasar el parto unas horas si las condiciones no les parecen propicias. Cuando las yeguas disponen de fincas amplias, con abundante comida y espacio, suele haber pocos problemas, pero si la ganadería no tiene mucho espacio y son corrales con bastantes ejemplares, es conveniente que separemos a la yegua, e incluso la adaptemos en los días previos a una paridera de gran tamaño con abundante cama donde parirá tranquila y podremos vigilar a madre e hijo durante unos días hasta que el potro se fortalezca y los soltemos de nuevo con la piara.

La importancia de la alimentación y socialización de los potros

potros

Como hemos explicado en el párrafo primero, los meses óptimos para preñar a la yegua van de enero a junio. Los celos más intensos en nuestra latitud son los que se producen en los meses de marzo, abril y mayo. Después de 11 meses, el potro nacerá en estos meses y tiene su sentido en la naturaleza. Un potro nacido en estos meses se podrá desatar con pasto verde y comida abundante, y cuando llegue el rigor del verano será un potro fuerte y adaptado capaz de enfrentar su primer verano.
La gestación, nacimiento y primeros meses del potro son cruciales para la edad adulta. Muchos síndromes, lesiones y problemas de salud tienen su origen en deficiencias alimentarias en alguna de esas fases. Un caballo potro bien alimentado, sano y fuerte podrá ser un gran caballo en su edad adulta. Alimentar correctamente a un potro ayuda a prevenir las lesiones en el adulto.
También es muy importante que el potro se críe en espacios abiertos y en contacto con otros potros de su edad, que aprenda a jugar y se socialice con otros caballos. Durante los primeros meses será su madre quien le enseñe códigos de conducta que serán indispensables lo largo de su vida. También es importante que se socialice con el ser humano, y que no vea en el aún enemigo. Este contacto facilitará posteriormente sus amansamientos y doma.
Traducir
Ir al contenido